EL PASO, Texas, AFP. El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, como medida de previsión de una situación «caótica», ha desplegado 24 mil agentes en la frontera con México para atender a los migrantes que tomen «vías legales» para ingresar a Norteamérica  y expulsar a los demás cuando el jueves expire una norma ligada a la pandemia.

«Será caótico por un tiempo», afirmó el martes por la noche el dirigente, que incentiva desde hace meses a los migrantes a acogerse a programas que intentan evitar una aglomeración en su frontera sur.

El jueves a las 23H59 hora de Washington (03H59 GMT) expira el llamado Título 42, una regla activada durante la pandemia que permite expulsar automáticamente a casi todos los que llegan sin visa o documentación necesaria para entrar a Estados Unidos.

La administración Biden intenta ahora convencer a los migrantes de recurrir a «vías legales», como pedir cita a través de la aplicación móvil CBP One para solicitar asilo en un puerto de entrada, recurrir a un permiso de reunificación familiar o acogerse a un programa que autoriza entrar a 30 mil personas por mes de Venezuela, Nicaragua, Cuba y Haití por motivos humanitarios.

«Le están poniendo las cosas más difíciles a uno», declaró a la AFP Michel, un albañil venezolano de 35 años que prefiere no dar su apellido mientras intenta en vano pedir cita a través de la aplicación móvil desde Ciudad Juárez (México). Se le agotó el tiempo, pero a partir del viernes estará activa 23 horas al día.

A  primeras horas de este miércoles someterá estas reglas de elegibilidad de asilo «para inspección pública», el paso anterior a su publicación en el registro federal, según declaró un funcionario gubernamental que pidió el anonimato en una rueda de prensa telefónica.

«No puedo hablar sobre los detalles de los cambios que se realizaron, señalaré que no fueron importantes», dijo el martes por la noche.

Las condiciones 

Cuando el gobierno propuso estas reglas, las ONG las compararon con una medida que el expresidente republicano Donald Trump intentó activar en 2019 para impedir la llegada de caravanas de migrantes. Los tribunales se lo impidieron.

Las reglas «impondrán condiciones significativas» sobre el acceso al asilo para quienes «no aprovechen estas sólidas vías legales (…) y no soliciten asilo en uno de los países por los que viajaron», añadió el funcionario.

La propuesta original de febrero incluía excepciones para los niños, las «emergencias médicas agudas» y las amenazas extremas e inminentes a la vida o seguridad de los migrantes.

Si los migrantes no son «elegibles al asilo» es altamente probable que acaben deportados en nombre del Título 8, una norma migratoria que ya se usa desde hace décadas y que permite expulsar a todo aquel que entre al país sin una visa o documentación requerida.

Gloria, una guatemalteca de 56 años, explicó a la AFP en Ciudad Juárez que no entiende la diferencia entre refugio y asilo. Solo intenta ponerse a salvo de amenazas de su expareja.